Sobre mi: 

 Hace más de 12 años que brindo capacitaciones y el principal problema que me transmiten los asistentes es, por un lado, el temor a utilizar flashes, por falta de conocimiento técnico, sintiéndose incómodos e inseguros.
 Y por otro lado, el hecho de que algunos fotógrafos tienen una buena base, pero se encuentran con limitaciones creativas, por falta de ideas y recursos, terminan haciendo siempre lo mismo.


 Mi formación y profesión me han obligado a entender los fundamentos de la iluminación desde las bases.
 Las exigencias de grandes clientes hicieron que sea lo más preciso, rápido y resolutivo a la hora de iluminar.

 En ocasiones, el cliente envía un brief con referencias que hay que cumplir al pie de la letra, y replicarlo en una nueva producción conlleva una gran lectura y conocimiento técnico.

 En otras ocasiones, te solicitan ser parte de la idea, y ahí es donde debemos proponer un tipo de iluminación para acentuar el carácter del retratado, generar una emoción, crear un clima, etc.

 También, en pleno shooting, puede que las cosas no luzcan como esperaban y te pidan que resuelvas de inmediato. Todo esto me ha dado un entrenamiento que pude llevar a cabo gracias a mi formación técnica y hoy quiero compartirlo contigo.